martes, 1 de abril de 2014

Yo soy

Una vez me dijeron que fui hoja en el viento,
que fui delfín, en el líquido elemento.

Que fui gaviota y otra vez volé en el viento
y que al morir fui partícula,
y cuando átomo fui, estuve en todas las cosas.


Estaba en el aire, en el sol, en una nube, en una estrella,

en la blanca nieve, en un planeta, en la tierra.


Era árbol, era pájaro, era agua, también fui tierra,

pero entre los dos barro fui.

Después también fui una piedra de las de una gran montaña.

Fui animal, de los grandes que corrían por un prado,
y luego fui uno pequeño que en un hogar protegían.
No sé si fui perro o gato,
lo que si sé que, después de todo esto,
pasé a ser humano.
Nací en Oriente y en Occidente,
fui blanca, amarilla, una india de piel roja.
Una negra también fu y hoy que te cuento esto,
después de lo que viví, ¿qué puedo decir de mi?
Que soy parte del universo,
que aunque camine en dos pies,
no sé si soy blanca o negra, ni sé si quiero saber,
si soy luna o si soy sol, solo sé que, igual que tú: "yo soy"



sábado, 1 de marzo de 2014

Amar lo que somos

Hacer lo que amamos. Amar lo que hacemos.
Ser lo que amamos. Amar lo que somos.

Constanza Cerutti

sábado, 1 de febrero de 2014

El Sabio

Un sabio, cierta tarde, llegó a la ciudad de Akbar. La gente no dio mucha importancia a su presencia, y sus enseñanzas no consiguieron interesar a la población. Incluso después de algún tiempo llegó a ser motivo de risas y burlas de los habitantes de la ciudad.

Un día, mientras paseaba por la calle principal de Akbar, un grupo de hombres y mujeres empezó a insultarlo. En vez de fingir que los ignoraba, el sabio se acercó a ellos y los bendijo.

Uno de los hombres comentó:

- "¿Es posible que, además, sea usted sordo? ¡Gritamos cosas horribles y usted nos responde con bellas palabras!".

"Cada uno de nosotros sólo puede ofrecer lo que tiene" -fue la respuesta del sabio-.

miércoles, 1 de enero de 2014

el secreto del éxito


El verdadero secreto del éxito es ser uno mismo, es hacer realmente lo que uno desea, es sentir realmente lo que uno desea sentir, es centrarse en lo más profundo de uno mismo, y ver lo que uno siente eliminando todo aquello que nos estorba, que nos aparta de nosotros mismos. 


Es olvidar el pasado y vivir el ahora con toda nuestra alma, concentrados en lo que vemos, lo que sentimos, lo que escuchamos, lo que olemos, saboreando la vida al máximo, disfrutando de todos los regalos de la vida, de todo lo que compartimos con los demás, deleitándonos con la belleza que nos rodea, amando y dejando que nos amen, creyendo en nosotros mismos y en nuestra grandeza y en los demás y su grandeza, afirmando nuestros deseos en voz alta, "sabiendo que ya están conseguidos". 


El secreto del éxito es crear un mundo al que todos quieran pertenecer, afirmar y decretar con certeza absoluta todo lo que albergamos en nuestro corazón, es hacer lo mejor que podemos cualquier cosa, es entregarnos y comprometernos al 100% en cada momento de nuestra vida, es liderar con el corazón siempre, es navegar por la vida sabiendo hacia donde vas, desafiando al destino, es saber lo que va a suceder -puesto que es consecuencia de nuestros deseos-, convicciones, determinación, coraje, decisión, trabajo en equipo, nuestra visión y nuestra fe. 

El secreto del éxito es saber que estás cumpliendo con tu misión en la vida que no es otra cosa que seguir "los dictados de tu corazón. "

¡Ahora que conoces el secreto del éxito, sé una persona de éxito y vive con pasión escuchando a tu corazón!

martes, 24 de diciembre de 2013

Mientras vivas... Brilla

En el solsticio de diciembre, en especial en las culturas romana y celta, se festejaba el regreso del Sol. A partir de esta fecha los días empezaban a alargarse. Esto se atribuía a un triunfo del Sol sobre las tinieblas, que se celebraba con fogatas. Posteriormente la Iglesia Católica decidió situar en una fecha cercana, el 25 de diciembre, la Natividad de Jesucristo, otorgándole el mismo carácter simbólico de renacer de la esperanza y de la luz en el mundo y corrigiendo así al mismo tiempo el significado de la festividad pagana previa, denominada Sol Invictus.




domingo, 1 de diciembre de 2013

Envejecer es obligatorio, crecer es opcional

El primer día de clase en la Universidad, nuestro profesor se presentó a los alumnos y nos desafió a que nos presentásemos a alguien que no conociésemos todavía.
Me quedé de pie para mirar alrededor cuando de pronto una mano suave tocó mi hombro.
Miré para atrás y vi a una pequeña señora, viejita y arrugada, sonriéndome radiante, con una sonrisa que iluminaba todo su ser.

Dijo: Eh, muchacho... Mi nombre es Rosa y tengo ochenta y siete años de edad, ¿puedo darte un abrazo?
Me reí y respondí: "¡Claro que puede! Y ella me dio un gigantesco apretón.
¿Por qué está Ud. en la Facultad en tan tierna e inocente edad? -le pregunté.

Y ella me respondió juguetona: Estoy aquí para encontrar un marido rico, casarme, tener un montón de hijos y entonces jubilarme y viajar.
Está bromeando, -le dije.

Yo tenía curiosidad por saber qué la había motivado a entrar en este desafío con su edad, y ella me dijo:- ¡Siempre soñé con tener estudios universitarios, y ahora los estoy teniendo!
Después de clase caminamos hasta el edificio de la Unión de Estudiantes, Y compartimos una taza de chocolate. Nos hicimos amigos instantáneamente.
Todos los días durante los siguientes estábamos en clase juntos y hablábamos sin parar.
Yo me quedaba siempre extasiado oyendo a aquella - "máquina del tiempo" -compartir su experiencia y sabiduría conmigo.
En ese curso de un año, Rosa se volvió un icono en el campus universitario y hacía amigos fácilmente dondequiera que iba. Adoraba vestirse bien, y se reflejaba en la atención que le daban los otros estudiantes. Estaba disfrutando LA VIDA... Al fin del semestre invitamos a Rosa a hablar en nuestra comida del equipo de fútbol. Fue presentada y se aproximó al pódium.

Cuando comenzó a leer su preparada charla, cayeron al suelo tres de las cinco hojas de su discurso.
Frustrada, tomó el micrófono y dijo simplemente: "Discúlpenme, ¡estoy tan nerviosa! Nunca conseguiré colocar mis papeles en orden de nuevo, así que déjenme hablarles sobre aquello que sé".

Mientras reíamos, ella despejó su garganta y comenzó:

- No dejamos de jugar porque envejecemos; envejecemos porque dejamos de jugar.
¡Hay tantas personas caminando por ahí que están muertas y ni siquiera lo sospechan! Se necesita conocer la diferencia entre envejecer y crecer.
Si usted tiene diecinueve años de edad y se queda tirado en la cama por un año entero sin hacer nada productivo, terminará con veinte años.
Si yo tengo ochenta y siete años y me quedo en la cama por un año y no hago cosa alguna, quedaré con ochenta y ocho años.
Cualquiera consigue estar más viejo. Eso no exige talento ni habilidad.
La idea es crecer a través de la vida y encontrar siempre oportunidad en la novedad.
Los viejos generalmente no nos arrepentimos por aquello que hicimos sino por aquellas cosas que dejamos de hacer.
Las únicas personas que tienen miedo de la muerte son aquellas que tienen remordimientos.

Al fin de ese curso, Rosa terminó el último periodo de la facultad que comenzó tantos años atrás. Una semana después Rosa murió tranquilamente mientras dormía.

Más de dos mil alumnos de la facultad fuimos a su funeral en tributo a la maravillosa mujer que enseñó, a través del ejemplo, que -nunca es demasiado tarde para ser todo aquello que uno puede probablemente ser-.


- ENVEJECER ES OBLIGATORIO, CRECER ES OPCIONAL -

viernes, 1 de noviembre de 2013

¿Cual es tu canción?


TEXTO DE TOLBA PHANEM: MUJER, POETISA, AFRICANA, DEFENSORA DE LOS DERECHOS CIVILES DE LAS MUJERES AFRICANAS.

Cuando una mujer de cierta tribu de África sabe que está embarazada, se interna en la selva con otras mujeres y juntas rezan y meditan hasta que aparece la canción del niño.
Saben que cada alma tiene su propia vibración que expresa su particularidad, unicidad y propósito.

Las mujeres entonan la canción y la cantan en voz alta. Luego retornan a la tribu y se la enseñan a todos los demás. Cuando nace el niño, la comunidad se junta y le cantan su canción.

Luego, cuando el niño comienza su educación, el pueblo se junta y le canta su canción.

Cuando se inicia como adulto, la gente se junta nuevamente y canta. Cuando llega el momento de su casamiento, la persona escucha su canción. Finalmente, cuando el alma va a irse de este mundo, la familia y amigos se acercan a su cama e igual que para su nacimiento, le cantan su canción para acompañarlo en la transición.

En esta tribu de África hay otra ocasión en la cual los pobladores cantan la canción. Si en algún momento durante su vida la persona comete un crimen o un acto social aberrante, se lo lleva al centro del poblado y la gente de la comunidad forma un círculo a su alrededor. Entonces le cantan su canción.

La tribu reconoce que la corrección para las conductas antisociales no es el castigo; es el amor y el recuerdo de su verdadera identidad. Cuando reconocemos nuestra propia canción ya no tenemos deseos ni necesidad de hacer nada que pudiera dañar a otros. Tus amigos conocen tu canción y te la cantan cuando la olvidaste. Aquellos que te aman no pueden ser engañados por los errores que cometes o las oscuras imágenes que muestras a los demás. Ellos recuerdan tu belleza cuando te sientes feo; tu totalidad cuando estás quebrado; tu inocencia cuando te sientes culpable y tu propósito cuando estás confundido.